lunes, 15 de junio de 2020

UNIDAD III. SISTEMAS DE ALMACENAMIENTO


3.1 Conceptualización



Los sistemas de almacenamiento son una de las ventajas competitivas más importantes de las empresas. Tanto es así, que gigantes de la distribución como Inditex o Amazon basan su crecimiento en la gestión adecuada de su logística y almacenamiento.

Es necesario investigar y utilizar el sistema logístico que más y mejor se adecúe tanto a las necesidades de la empresa como a las circunstancias que lo envuelvan.

Objetivo de un sistema de almacenamiento

Contar con un método de almacenamiento adecuado posibilita la gestión eficiente de las mercancías y aumenta la competitividad. Permite a una empresa abarcar una mayor cuota de mercado y ahorrar tanto en tiempo como en dinero.

El objetivo principal de cualquier sistema de almacenamiento está relacionado proporcionalmente con la eficiencia de su logística desde la recepción de la mercancía hasta la distribución de la misma por el almacén.




3.2 Técnicas de envase, empaque y embalaje


LAS 4 E´s de la LOGISTICA.
Envase, Empaque, Embalaje y Etiqueta para la Exportación.

A lo largo del tiempo, los humanos hemos trasladado una infinidad de artículos y productos de punto A al punto B, utilizando desde hojas gigantes de plátano hasta bolsas, cajas y botellas, como lo hacemos hoy en día. Cuando transportamos artículos y productos, es importante determinar y saber la diferencia entre tres conceptos básicos de logística: empaque, embalaje y envase.


¿Qué es el Empaque?

El empaque es la presentación comercial de un producto. Asegura que al transportar este no se dañe ni entre en contacto con el exterior para mantenerse limpio o fresco en caso de que sea un alimento. Además, el empaque logra la venta del producto, dando una buena imagen y distinción sobre otros productos similares. El empaque es la forma de presentar el producto en el punto de venta.
Como podemos ver, el empaque está más orientado al marketing y si bien, su objetivo es proteger el producto que lleva dentro, el principal objetivo es vender. Nos podremos dar cuenta que el empaque suele ser lo mismo que el envase, pero no en todos los casos.

¿Qué es el Envase?

El envase es el envoltorio o contenedor que tiene contacto directo con el contenido de un producto. Algunos ejemplos de envase pueden ser la bolsa de papas, la botella de un vino, o la caja donde esta guardada una computadora. Tiene la función de ofrecer una presentación adecuada que facilite la venta, el manejo, transporte, almacenaje, manipulación y distribución del producto. ¿Bastante similar al empaque no? Existen casos en los que el empaque y el envase son lo mismo, como una bolsa de papas. Pero al igual existen productos en donde el empaque y el envase son diferentes:
Un ejemplo de un producto con envase y embalaje diferente puede ser una botella de vino. En una botella de vino el envase primario es la botella, después puede tener un empaque secundario que sería una caja de madera con el logo de la marca grabado en láser, y finalmente, tendríamos un embalaje terciario que es la caja de cartón donde transportaremos 15 cajas de vino.
¿Qué es el Embalaje?

Como pudiste ver en el ejemplo anterior, el embalaje es una forma de empaque que envuelve, contiene, protege y conserva los productos envasados y/o empaquetados. El embalaje va más orientado a la protección del producto durante el transporte logístico. El embalaje no necesariamente debe ser una caja, también el embalaje puede ser el plástico que ponemos alrededor de un producto envasado o empaquetado.
Depende mucho de qué tipo de envase, empaque o embalaje estemos hablando, pero la regla es que el embalaje siempre es de tipo terciario para transportar nuestros productos e informar en el exterior las condiciones de manejo, requisitos, símbolos e identificación de su contenido.


¿Y qué es el embalaje primario, secundario y terciario?

Teniendo en cuenta las definiciones de empaque, embalaje y envase es muy sencillo hacer la distinción:
·         El embalaje primario (comúnmente llamado envase primario), es el que está en contacto directo con el producto.
·         El embalaje secundario (también llamado envase secundario), es el que protege al embalaje primario y se desecha en el momento que es usado el producto.
·         El embalaje terciario (también llamado envase terciario o de transporte), es el que protege al producto al momento de transportarlo, generalmente utilizado para exportación o distribución, contiene muchos embalajes primarios y secundarios
¿Cómo proteger mis envíos?

En caso de que el producto sea frágil u ocupe menos espacio dentro del empaque, te recomendamos revisar el embalaje por el interior antes de sellarlo.
Los artículos frágiles SIEMPRE deben estar envueltos y amortiguados dentro del empaque. Un buen material para ello es el plástico burbuja (aire encapsulado), moldes de unicel o el clásico relleno de corrugado. De esta forma cada producto estará protegido y firme. Además, aquí te dejamos otro par de recomendaciones:
·         Si el producto se cubre con material de relleno, procura centrarlo dentro del paquete.
·         Cubre el producto con almohadillas, paneles, corrugados, cintas o esquineros, si éste tiene bordes cortantes o salientes.
Si el contenido del paquete puede dañarse, ensuciarse o derramarse durante el transporte, colócalo dentro de un recipiente que lo proteja. También toma en cuenta que hay cajas con la señalización adecuada para indicar la posición del empaque, la estriba máxima, mantener libre de humedad, entre otros.
Si se envían cantidades grandes de artículos pequeños, te recomendamos usar bolsas como envase secundario y cajas para el embalaje. Si la caja sufre algún daño, los artículos seguirán protegidos. Para maletas y estuches reutilizables puedes utilizar playo para que las etiquetas o cintas no estén en contacto directo con tu producto.
Por último, es recomendable que el empaque sea de acuerdo al tamaño del producto, nunca más chico. Recuerda ubicar la información de entrega y de origen dentro del paquete antes de sellarlo.

¿Cómo sellar un paquete?

Una vez que has verificado que tu producto está seguro en el empaque para llegar a su destino viene la parte de sellado. En mienvío te recomendamos que tengas en cuenta estos puntos:
·   Usa cintas plásticas, reforzadas con fibras de plástico, de seguridad o engomadas que tenga al menos 5 cm (2 in) de ancho.

·       Aplica la cinta de forma homogénea en las solapas, así como en la parte superior en inferior de las tapas. A esto se le llama Método H de empaquetado.

·        No uses cuerdas o flejes para cerrar el paquete, la paquetería las removerá en caso de encontrarlas.
  • Las cintas de celofán o transparentes corren el riesgo de desprenderse, evita usarlas.
  • Si la cinta es angosta, debes colocarla de manera transversal a la caja.
Dirección y etiquetado del empaque

Nuestro embalaje está casi listo, lo único que falta antes de enviarlo, es añadir la guía. Recuerda que las medidas que solicita el sistema a la hora de adquirir la guía, son las medidas de la caja donde envías.
Como lo mencionamos anteriormente, hay que ubicar la información de origen y destino dentro y fuera del paquete. Las etiquetas deben ir en la superficie más grande del paquete, de esta forma, la paquetería podrá orientarlo más fácilmente en caso de que no cumpla con las señales como “Este lado hacia arriba”. Elimina cualquier etiqueta antigua de la caja, en caso de que exista.
Otras recomendaciones
·         Utiliza cajas originales del producto o nuevas.
·     Si el producto es muy pesado, utiliza cajas de pared doble para garantizar protección.
·         No empaques en recipientes de unicel.
·         Utiliza las cajas de acuerdo al tamaño y peso del producto.
·       No envuelvas el paquete con papel de regalo, éste puede dañarse durante la transportación y la presentación del paquete resultará menos atractiva.

Ahora sí, tu paquete está listo para ser recolectado o entregado en la paquetería y llegar a las manos del usuario final. Recuerda que el empaque también es una forma de conectarte con tu cliente y brindarle una grata experiencia.



3.3 Técnicas de almacenamiento de materiales



Productos vencidos, faltantes, dañados, accidentes laborales, entre otros; son algunos de los efectos que se generan por un manejo inadecuado de productos en almacén. Todos estos efectos se traducen en pérdidas económicas para la empresa. En esta entrada aprenderás 7 técnicas de almacenamiento de productos que te ayudarán a mejorar la gestión de tu almacén y evitar pérdidas.


La distribución física dentro de un almacén debe garantizar:
·          La alta calidad y perfecto estado de los productos almacenados.
·          Una operación y uso de espacio eficiente.
·          La seguridad del personal y de las instalaciones.

Estas 7 técnicas de almacenamiento de productos contribuyen a que nuestro almacén de productos cumpla los puntos mencionados. Adicionalmente estas técnicas se complementan perfectamente con las famosas 5S.


Objetivo de las 7 técnicas de almacenamiento de productos:

Los objetivos que se obtienen con la aplicación de estas técnicas de almacenamiento son:

·          Mejorar la organización y el control del almacenaje.
·          Reducir el tiempo de sacado y guardado de los productos (picking & binning).
·          Mejorar la productividad del personal.
·          Mejorar la eficiencia y el uso de los espacios.
·          Incrementar la seguridad en el manejo de los productos.


 1. Agrupar los productos similares

Uno de los errores mas comunes en el almacenamiento, es no agrupar los productos de características similares en un lugar determinado. Normalmente se elige el tipo de producto como criterio principal de almacenamiento; sin embargo, podemos tomar criterios adicionales al tipo, como la forma y el tamaño, para aprovechar los espacios y optimizar las rutas de almacenado.
Así por ejemplo, en la siguiente imagen vemos un almacén donde se tienen diferentes  productos almacenados por tipo. El trabajador debe recoger los productos A, B y C.



Podemos darnos cuenta que se desperdicia espacio en la parte superior de algunos productos (sombreado azul). También podemos ver un producto que se encuentra doblado (señalizado por la estrella), poniendo en riesgo su integridad y calidad. La ruta que debe hacer el trabajador abarca todo el estante.
Ahora realizaremos una redistribución considerando, adicional al tipo de producto, el tamaño y la forma:





Podemos visualizar que se reduce el espacio de almacenamiento, la ruta del trabajador y se cuida la integridad del producto (largo).





Es importante verificar  si el producto permite el apilamiento y también la compatibilidad de almacenamiento (en productos peligrosos).





2. Almacenar los productos verticalmente

Los productos largos y planos deben almacenarse verticalmente. Esto reduce sus pisadas y libera espacio para otros productos. También reduce el posible daño en productos debido al apilamiento.





3.   Almacenar los productos para fácil alcance

 

Muchas veces, en el afán de aprovechar al máximo el espacio, algunos almacenes tienen sus productos en áreas de difícil alcance. Seguramente alguna vez viste a alguien sacando productos desde la parte alta de un estante con algún palo (cof cof la bodega de la esquina cof cof). Este tipo de situaciones representan un riesgo para el trabajador.
Por lo tanto, debemos considerar que todas las áreas de almacenaje sean de fácil alcance para sacar y guardar. Se deben reducir las actividades de buscar, alcanzar y agacharse; además de proveer la forma más rápida posible de alcanzar los productos.




Como se muestra en la imagen los productos deben  estar ubicados ni tan alto ni tan bajo. Esto nos permitirá incrementar la eficiencia de las operaciones y obtener un ambiente de trabajo seguro.


4.   Almacenar los productos pesados en la parte de abajo o al nivel de la cintura





En el punto anterior indicábamos del riesgo que representa colocar los productos en niveles muy altos; porque podrían caer encima del trabajador y golpearlo. Ahora imagina que el producto que caiga sea un objeto pesado. Probablemente estaremos frente a un accidente mortal.



Es por ello que la cuarta técnica indica que los productos pesados no deben colocarse en la parte superior del almacén; con el fin de reducir la necesidad de usar equipo especial y la posibilidad de accidentes. Almacenar a un nivel de cintura hace más fácil y seguro el sacado y guardado.


5.   Establecer una ubicación diferente para cada producto

 

Como quinta técnica debemos establecer una ubicación única para cada producto; no almacenar diferentes productos en la misma ubicación o un mismo producto en diferentes ubicaciones.




Es importante señalizar y codificar cada ubicación del almacén para facilitar su búsqueda:



sta codificación debe ser sencilla y de fácil interpretación para el trabajador, como la propuesta en la imagen anterior.

Esto minimizará errores en el almacenamiento y recolección de productos; y nos facilita el control de las ubicaciones vacías.




6.   Control de Irregularidades por medio visual

El orden en un almacén siempre será indispensable para cuidar de nuestros productos; sin embargo, también nos sirve para controlar las irregularidades de manera visual, como en la siguiente imagen:



Si tenemos separado el sobre stock de un producto en la parte superior con un indicador nos va a facilitar determinar la condición del inventario.
En la siguiente imagen podemos apreciar mas claramente las ventajas que obtenemos con la aplicación de esta técnica.




7.    Almacenar los productos de acuerdo con la clase de movimiento

 

La ultima técnica nos indica que los productos de movimiento rápido deben encontrarse en áreas de fácil alcance; con el fin de acortar las rutas de guardado y sacado de productos; como también crear la operación más eficiente para los productos de movimiento rápido.



Finalmente, mostramos un cuadro con las relaciones de cada técnica con el mejoramiento en espacio, calidad, operaciones eficientes, productividad, almacenaje y seguridad. El símbolo del círculo indica que si tiene relación y la X que no tiene relación.

Reflexión Final

 

Estas 7 técnicas de almacenamiento de productos, son de aplicación sencilla, pero de gran impacto en la gestión de almacenes. Seguramente te percataste que algunas de las imágenes que mostramos a lo largo del post tienen la marca Toyota; esto se debe que estas 7 técnicas junto a otras herramientas como las 5’SKaizen, entre otros; son pilares fundamentales en la gestión de repuestos en su red de concesionarios. Gracias a mi experiencia en el área de procesos de uno de ellos, es que pude ver de cerca la aplicación de estas técnicas.
Si tienes alguna duda, sugerencia, opinión, etc. respecto a las técnicas mencionadas, te invitamos a dejarlo en nuestra sección de comentarios. Además puedes revisar nuestras secciones del blog; donde, estamos seguros, encontrarás otros temas de tu interés por ejemplo: Cómo identificar problemas en una empresa para mejorarla.


3.4 Bodegas manuales y automatizadas

Tipos de sistemas de almacenamiento

Determinar el método con el que clasificar los productos de un almacén es fundamental para que se optimice el trabajo de una empresa. Para ello se deben tener en cuenta las características de los productos, la colocación de las mercancías y, sobre todo, su rotación.
Algunos de los sistemas de almacenaje más utilizados son los siguientes:

Sistema de almacenamiento convencional

Es el más utilizado y almacena las unidades individuales combinadas con mercancías en palets. Se tiene acceso al producto y se adapta a cualquier carga en volumen y peso. Los niveles elevados se destinan a los palets completos y los bajos a la preparación manual o picking.




Las estanterías tienen doble acceso y en centro y uno en el lateral, además, su altura está marcada por las carretillas elevadoras, la dimensión del local y el producto almacenado.

Sistema de almacenamiento compacto

Este sistema aprovecha al máximo el espacio, tanto en altura como en superficie. Está indicado para almacenar gran cantidad de palets por referencia con unidades homogéneas.
Las instalaciones son un conjunto de estanterías con carriles y calles interiores de carga. Las carretillas se adentran en las calles con la carga por encima del nivel de almacenaje. Si los productos de cada calle poseen la misma referencia, se evitan manipulaciones innecesarias.

Sistema de almacenamiento dinámico

Cuando se tiene una rotación perfecta, este es el sistema más eficaz, ya que la gestión de la carga cumple con los criterios de entrada y de salida.
Son estructuras compactas que incorporan rodillos a modo de camino con una pendiente ligera que permite el deslizamiento de la carga sobre ellos, aunque existen algunas variantes también sin rodillos en las que el desplazamiento se realiza por la gravedad.



Sistema de almacenamiento móvil

Es muy similar al convencional, pero la estructura reposa sobre raíles para poderse desplazar. Al compactarse las estanterías se aumenta de forma considerable la capacidad del almacén sin que se pierda el acceso directo a cada una de las referencias.
Se puede contar con los beneficios de un sistema compacto pero con un aprovechamiento superior del espacio. La clasificación atiende al tipo de carga y a la fuerza que permita el desplazamiento.
En función de la carga, en un almacén donde el producto está paletizado las estanterías pueden ser para productos de baja o media rotación, cámara frigorífica o almacén intermedio. En función de la fuerza del desplazamiento serán manuales o automáticas.



Sistema de almacenamiento semiautomático – automático

Este tipo de almacenaje facilita la diferenciación de los servicios y la oferta de productos debido al aumento de la productividad en la logística y la reducción de costes. Se opera con transelevadores de palets mediante equipos robotizados y sirve tanto para almacenar cajas como palets.



Con este sistema se minimizan los errores en la manipulación de las cargas y se facilita el inventariado. Ofrecen grandes prestaciones, amplios horarios, mantenimiento sencillo, alta productividad y flujos continuos tanto en la entrada como en la salida de la mercancía.




Estos sistemas están dotados con un software de gestión con el que controlar e identificar toda la mercancía.




Se pueden diferenciar 3 tipos de almacenaje automático:

ver vídeo de un almcén automátizado.

https://www.youtube.com/watch?v=-IGN_eoD0ZI&t=128s
– Uniload: diseñado para almacenar individualmente unidades de carga de manera automática.

– Miniload: almacena cargas ligeras y pequeñas de gran rotación. La automatización permite el aumento de la productividad, ya que se minimizan los errores de manipulación.

– Transelevador o autoportante: ideal para grandes alturas.

Sistema de almacenamiento autoportante

Son soluciones de automatización y almacenamiento integral en el movimiento de la carga: Permiten un aprovechamiento máximo de la superficie disponible porque se alcanzan alturas de almacenaje elevadas.
Las estanterías soportan la cubierta y las instalaciones del propio espacio sin necesidad de pilares o vigas. Así se evita la construcción de una nave industrial y se rentabiliza y automatiza al máximo el espacio de almacenaje.
La manipulación de carga se realiza con transelevadores y se garantiza una operatividad única.
Para concluir, con independencia de los sistemas de almacenamiento escogidos, existen dos pilares básicos que han de tenerse en cuenta: la resistencia de los materiales y la calidad.

Es fundamental optimizar el espacio de almacenamiento facilitando la manipulación de la carga y reduciendo los costes. Por ello te recomiendo que leas el siguiente post: Almacén caótico o con multi-ubicación, una solución para optimizar el espacio y la gestión.






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